Ese trozo de machismo en mi interior

No soy de los que creo que ellas deban cocinar y hacer el aseo.
No soy de los que se quedan sentados tomando un café luego del almuerzo.
No soy de los que piensan que las mujeres deben quedarse con los niños.
De hecho yo me quedaría con los niños. Llevo el desayuno a veces aunque
me gusta que me lo lleven. Me gusta cocinar. No hago la cama
pero no espero que me la hagan. Y no me siento tonto cuando ella
hace lo que se supone debiese hacer yo y que por incompetencia mía
lo termina haciendo ella. Esos trabajo de carpintería o de plomería o de eléctrica
para los que, debo reconocer, no tengo los dotes necesarios.
Pero sin embargo:
Me sorprende que una mujer haga una página de interné.
Me asombran las mujeres que no comenten faltas de ortografía, aunque los hombres tampoco tienen buena ortografía. La verdad es que eso me sorprende en los dos bandos.
Me impresiona que una mujer sea capaz de poner un link.
Me sorprende que una mujer componga música interesante.
Me maravilla que una mujer se ría de las mismas
cosas que yo, que tengan el mismo sentido del humor.
Me sorprende que una mujer sepa donde queda Canadá, Zimbawe o Madagascar.
También me sorprende que sepa todo tipo de cosas ligadas a fenomenos naturales.
Me guste que se apasionen y sorprendan al ver
comportamientos animales que parecen triviales.
Me encanta y me pasmo al ver que pueden ver esas cosas que he pensado que no ven.
Que vean las noticias me da un gusto hermoso.
Que me hagas callar cuando dicen esa noticia de interés
Si, me sorprende que hagan algunas cosas. Y que aún así se preocupen
de su ropita y sus cositas para verse lindas. Me gusta, me fascina que te veas linda.
Perdón, pero creo importante el hecho
de poder reconocerlo.
Por algo se parte.