Camino a casa

Si, en un momento comenté: " Yo vivo al lado de esa wea". Esa wea era Colón con Río Guadiana. Los que me conocen sabrán que yo vivo a escasos metros de dicho lugar. La cosa es que mi amigo se bajó mucho antes, y no dejó de advertir que yo me bajaba en el camino. Yo me quedé muy conforme y creí que los comensales también. Me preguntaron
"Por arriba o por abajo" y yo respondí, sinceramente y sin ninguna doble intención: "Por arriba" por que para mi de seguro era mas conveniente pasar por el puente, o sea por arriba, no estaba dispuesto a caminar ni dos cuadras. Seguimos el camino natural y cuando llegamos a Rio Guadiana con Colón donde yo debía bajarme, ella dijo:
"Aquí me bajo yo" y se bajó. Bien, pensé yo, mi casa está al lado y debo bajarme. Ella insistió en que su acompañante seguía algunos metros mas arriba. Pero yo insistí en bajarme en ese lugar, era el mejor lugar para bajarme y llegar pronto a casa, mi hogar estaba a pocos pasos. Pero ella, atemorizada por mi presencia en los barrios, se bajó muy apresurada y caminó cual maratonista, y a mi no me quedó mas remedio que asegurarle al conductor que yo no la perseguiría, que yo no era un pervertido sigue mujeres, ni cagando era mi intención. Solo dije eso por que mi verdadera intención no era seguirla, sino que era llegar a mi casa lo mas rápido posible. Ella desde luego pensaba que mi casa no quedaba por los alrededores, estaba un poco asustada o eso fue lo que yo creí. Yo seguí el camino a mi casa sin importarme un carajo donde ella se había metido, de hecho no la vi mas. Lo cierto, y no quiero ser majadero, es que yo caminaba tranquilamente hacia mi hogar, en Toltén con Dr. Ernestina Perez, y de cierta forma me dió rabia que ella pensara que yo la perseguía. Todo comenzó cuando yo comenté: "En este auto hay un agradable olor, entre Polo Sport y Tommy Hilfiger". Creo que ese fue mi gran error. Y ella sin duda se asustó un poco.